Desde el exterior, el edificio aparece como un bloque oscuro y cerrado, su techo se curva hacia abajo en los bordes. Está revestido monolíticamente de lava de basalto gris antracita en las fachadas y las superficies del techo: por lo tanto, está claramente separado del nivel adyacente y parece emerger de las profundidades.
Una escalera exterior de diez metros de ancho conduce a la meseta de entrada a cuatro metros sobre el nivel del patio. En el interior, una sala iluminada desde arriba divide todos los niveles en dos grupos de habitaciones de proporciones diferentes. El nivel de entrada es el centro de la altura del edificio. Dos niveles principales de exhibición están arriba y dos debajo. Otro nivel inferior se utiliza para almacenamiento y servicios públicos.
En términos de diseño arquitectónico, las instalaciones del museo están limitadas a la reducción general. Están equipados con un sistema de iluminación artificial sofisticado y flexible que crea condiciones de presentación óptimas. La sala de exposiciones superior recibe luz natural a través de una gran abertura en el techo curvo. Las otras aberturas en forma de hendidura y la ventana panorámica en el piso superior brindan a los visitantes una vista al exterior y ayudan a proporcionar un sentido de orientación.
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